Un retroceso frente a 2024 y al primer trimestre; el Gobierno admite un balance “muy deficiente”
La Habana, 9 de septiembre de 2025. La ocupación hotelera en Cuba se situó en 21,5% durante el primer semestre del año, según el informe Turismo Trimestral de la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI). El dato supone un descenso de casi siete puntos respecto al mismo periodo de 2024 y un retroceso frente al primer trimestre, cuando promedió 24%.
Entre enero y junio, el país recibió 981.856 visitantes, lo que supone una caída del 25% interanual. En paralelo, la estancia media pasó de 6,1 a 5,8 noches, una reducción de alrededor del 5%. La combinación de menos llegadas y viajes más breves presiona la ocupación y los ingresos del sector.
Aunque tras la reapertura pospandemia hubo una recuperación parcial, el turismo sigue por debajo de los niveles previos a 2020. En 2024 Cuba recibió 2,2 millones de visitantes, menos de la mitad que en 2018, una brecha que el desempeño del semestre no logra cerrar.
A finales del primer semestre del año, el ministro de Economía, Joaquín Alonso Vázquez, calificó el balance del sector como “muy deficiente”. Con una ocupación en el entorno del 20%, el sector afronta decisiones de ajuste operativo de cara a la temporada alta del invierno.
La actividad turística opera con apagones frecuentes tras años de baja inversión y el deterioro agravado por la temporada de huracanes de 2024, que dejó colapsos y protestas. El presidente Miguel Díaz-Canel ya manifestó que los apagones son hoy el principal obstáculo al turismo.
En el frente externo, el Gobierno cubano atribuye parte del descenso turístico al embargo de EE.UU. Señala además las restricciones al turismo estadounidense.
Y la permanencia de Cuba en la lista de Estados patrocinadores del terrorismo disuade a europeos, al inhabilitarlos para el ESTA y obligarlos a tramitar visado para entrar en EE.UU. Resultado: menos llegadas y viajes más breves presionan ingresos de cara a la temporada alta.
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